Manuel Alcaraz comparte la historia de cómo surgió la idea de ser actor

Manuel comparte la historia de cómo surgió la idea de ser actor y como fue el trayecto para convertirse en el asesino de la serie “Donde hubo fuego” del escritor chileno losé Ignacio Valenzuela, que logró un grandioso éxito a nivel mundial.

Desde siempre tuve muy claro que lo mío era la actuación, mi aspiración siempre fue trabajar en Televisa, pero ni mi mamá ni mis tíos querían que me dedicara a esto y “tuve que pasar por tres universidades para encontrar mi camino” recordó, que en total, paso por 3 universidades, su mamá deseaba una carrera universitaria para su hijo, pero Manuel se aferraba y decía que no importaba la escuela a la que lo metieran, que no estudiaría algo que no fuera actuación, sin importar que su familia le recomendara lo contrario o que incluso que sus amigos o conocidos se burlaran de él.

En Pachuca se abrió la escuela de actuación de Carlos Espejel y al ser tan insistente con la actuación, su mamá le dio a oportunidad de visitar a escuela y conocerla.

Haba muy buenos maestros que incluso también daban clases en el CEA y en casa Azul y a los 3 meses de haber estudiado artes escénicos hicieron un festival nacional en algunos estados y asi me dieron mi primer premio como protagónico ahora tengo 15 años en la actuación, pero mi inicio fue como el extra del extra' narro.

Manuel Alcaraz, quien le dio vida a Hugo, el asesino serial de “Donde hubo fuego” contó que sus inicios no fueron nada sencillos, pues hubo una época donde, en la búsqueda de su sueno de ser actor, tuvo que vivir en su automóvil en Ciudad de México “Aunque mis tíos y mis primos me brindaban su casa me quedaba muy lejos de las instalaciones de Televisa San Ángel así que no me quedo de otra que vivir
en mi auto, mi closet era mi cajuela, me bañaba en el gimnasio y de ahí me iba a hacer sala
, a las oficinas de doblaje, me iba a los castings, ensayos de teatro y de jueves a domingo daba funciones en teatro” dijo.

Contó que había ocasiones en que el dinero no era suficiente para comer, por lo que llegaba al teatro y en la cafetería pedía un hot dog y un agua y les decía que se me había olvidado la cartera y luego pasaba el efectivo, y ya el domingo que cobraba pagaba.

La primera vez que pisé Televisa, me enamoré de las luces, los escenarios y haber sido extra me enseñó muchísimo; sin embargo, hubo una época donde por cuestiones de salud tuve que parar todo, luego la salud de mi mamá se debilitó y tuvimos que viajar de Pachuca a México para estar cerca de los doctores y ahí aproveche para hacer teatro' nos compartió.

Al estar inmerso en el teatro, topé con la gran Lolita Cortés y ella se convirtió en mi segunda mamá por todo el apoyo y enseñanzas que me brindó

Posteriormente, una ocasión cenando con mi mamá, me llamaron de Argos, me dijo que le gustaría proponerme para un personaje, me pidieron una fotografía, me dieron un guion y me dijeron que tenía que grabarlo y enviarlo, pasó tiempo y pensé que ya no me llamarían, pero luego recibí una llamada para felicitarme por qué me habían dado el papel'. Narró.

Vio que era el antagonista y la emoción fue enorme, pues nunca se hubiera imaginado que sería el villano de Netflix y le dijo a su mamá: “mamá no me lo vas a creer, soy el villano de la historia” y fue así como inició esta aventura.

El aprendizaje fue constante para Manuel, su relación con los grandes de la actuación le han otorgado un extra y momentos increíbles en su carrera, pues nunca imaginó que el papel de Hugo o incluso que la serie fuera tan exitosa.

Estoy enormemente complacido por haber coincidido en esta gran producción, a mí me gusta mucho la comedia y si me dan ahorita una comedia sería el más feliz, pero los villanos son los villanos' expresó.

Sus aspiraciones son continuar haciendo series, pero siempre con los pies en la tierra, afirmó que un actor siempre tiene que tocar puertas, así sea el ganador del Óscar, pues considera que en esta carrera no hay oportunidad de rendirse.

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