Vecinos de fraccionamientos como La Esmeralda, Pitahayas, El Carruaje, Electricistas, Haciendas de Hidalgo, junto a Camelinas y Rubirosa bloquearon esta mañana el bulevar Santa Catarina para exigir el cese a la construcción de un albergue para niños, niñas y adolescentes migrantes o en situación de movilidad, al asegurar que la presencia de este espacio les traería “inseguridad” e “insalubridad” por la presencia de personas de otros países.
La mañana de este viernes, alrededor de una centena de colonos del sur de Pachuca bloquearon el bulevar Santa Catarina, una de las principales vías de conexión para entrada y salida de la ciudad, a la altura de la entrada a los fraccionamientos de Pitahayas y Electricistas, lo que provocó caos vial y dejó varados a varios automóviles por tres horas.
El reclamo: la construcción de un albergue perteneciente al Sistema DIF estatal para la atención de niñas, niños y adolescentes migrantes en Pachuca, que tendrá una inversión de recursos federales por 53 millones 498 mil 151 pesos y pretende beneficiar a 150 personas en situación de movilidad.
No al albergue, exigimos diálogo y respeto a nuestra comunidad”, “No a la obra”, “Primero utiliza recursos para mejorar nuestras calles”, se leía en las cartulinas con consignas empleadas por los manifestantes en el cerrar vial.
En tanto, otro grupo de colonos se dispuso a la clausura simbólica de la obra en ejecución, ubicada a un costado del aeropuerto Juan Guillermo Villasana.
En el sitio, algunos de los inconformes señalaron que primero se deberían atender obras y servicios para los hidalguenses, por lo que señalaron al albergue como no prioritario, además de que, a su juicio, traería consecuencias “negativas” para los colonos de la zona.
Va a generar violencia, va a generar contaminación ambiental, problemas de salud. Como hemos visto en otros estados, los lugares que son albergues a su alrededor siempre hay más generación de violencia”, refirió uno de los inconformes en el bloqueo.
Al reiterar que habría inseguridad y problemas de salud por la presencia del espacio para niñas, niños y adolescentes migrantes, pues conjeturaron que sus padres pernoctarían a las afueras y establecerían campamentos en los alrededores.
“Este bulevar se va a volver como está en Tláhuac, como está afuera de la central camionera de la Ciudad de México, un montón de casitas de campaña, lavando, haciendo sus necesidades, haciendo de todo. ¿Por qué tenemos que permitir nosotros aquí si hemos luchado que esto esté bien’”, planteó otra inconforme al dar por hecho la presencia de migrantes en las aceras del bulevar.
Pese al rechazo a la presencia de las personas extranjeras, aseguraron “no estar en contra de los migrantes” por ser seres humanos. Señalaron que simplemente no quieren que en ese lugar edifique el albergue, sino que sea en otro espacio para que estén “mejor”.
Aseguraron que la obra no fue socializada con los habitantes de la zona, además de que alegaron que el predio debió ser utilizado en la construcción de un espacio para los vecinos, como un parque.
En el lugar de la obra, el director general del Sistema DIF Hidalgo, Ricardo Enrique Arvizo Contreras, se entrevistó con otra parte de los colonos, quienes, confirmó posteriormente, accedieron a entablar una mesa de trabajo con las autoridades estatales.
Como gesto de buena fe, dijo, se frenaron los trabajos y los obreros abandonaron el terreno, además de acordar una reunión en punto de las 17:00 horas en palacio de gobierno para plantear una solución a la inconformidad.
Entendemos que la ciudadanía tiene muchas demandas, en esta ocasión le tocó al Sistema DIF (…) la construcción del albergue migrante, es para niños, niñas y adolescentes, que ese es el tema relevante, no es para personas adultas, es una política pública federal, quién no vea el tema de la migración como un problema social, pues está en un grave error”, planteó Arvizo Contreras en respuesta al rechazo al proyecto.
Tras escucharse voces de vecinos que recriminaron la inversión aportada para el albergue y no para esa zona de la capital, abundó que hay una obligación de atender a este sector de la población, ya sean nacionales o de otros países, y reestablecer su derecho de protección.
Posteriormente a esa intervención, vecinos que acordaron la reunión de la tarde con autoridades estatales dieron el aviso a sus compañeros que bloqueaban la vialidad, lo que causó división de posturas entre quienes aprobaron levantar el cierre vial y los que se pronunciaron por mantenerlo hasta tener una respuesta e insistieron en que la medida era cancelar la construcción.
El debate entre colonos se extendió por media hora y posteriormente se acordó la apertura de la carretera, con la condición de no continuar con los trabajos del albergue hasta no ser atendidas sus demandas, por lo que se firmó una minuta con los representantes del gobierno estatal.
En punto de las 10:30 horas, tras alrededor de tres horas de bloqueo, se reabrió la circulación, aunque con la amenaza de un nuevo cierre si no existe un consenso en la reunión de la tarde.
Editor general, reportero
