Un grupo de mujeres realizaron una protesta, durante el desarrollo de la sesión de Cabildo del ayuntamiento de Pachuca, para pedir la destitución de Gerardo Javier Reyes Monzalvo, secretario General del municipio, por presuntamente haber encubierto a un funcionario público estatal que agredió a una de sus compañeras con un cúter, cuando era funcionario del gobierno de Omar Fayad Meneses.
Itzel Gallardo, la mujer agredida, recordó que el 23 de mayo de 2022 fue atacada al interior de las oficinas del palacio de gobierno por su compañero Diego Arturo “N”, quien ya fue vinculado a proceso por los delitos de aprovechamiento sexual y lesiones.
Narró que en ese entonces sus compañeros de administración no activaron el Protocolo Cero contra la Violencia y señaló a Reyes Monzalvo, quien se desempeñaba como subsecretario de Desarrollo Político de la Secretaría de Gobierno en la administración del exgobernador Fayad Meneses, de omisión de la agresión y haber encubierto al agresor, pues era el jefe del área, e informó que también fue denunciado penalmente.
Hay una denuncia penal contra Gerardo por encubrimiento (…) Si supiera las obligaciones que tenía no estaría en una denuncia penal”, refirió ante medios de comunicación.
Por lo cual, Gallardo también presentó una queja en contra del Secretario General del municipio, por encubrimiento. A lo que, dijo, el alcalde Sergio Baños Rubio se comprometió a iniciar un procedimiento administrativo en contra del funcionario público municipal e iniciar las investigaciones a partir del próximo martes. Por lo que las mujeres que acudieron a la protesta y la víctima pidieron la destitución del funcionario o una suspensión.
(…) es muy importante porque recordemos que no debe haber ningún servidor público violentador ejerciendo un cargo”, dijo la víctima.
En respuesta, Gerardo Javier Reyes refirió que no presenció los hechos, pues llegó a la oficina dos horas después de la agresión. Por lo que dijo que dio vista al Órgano Interno de Control (OIC) y se deslindó de tener responsabilidad de investigar o suspender al presunto agresor.
Además, señaló que hay dos testigos que contradicen la versión de Itzel, lo cual fue reprochado por las activistas y la víctima. Aseveró que “ninguna instancia” le ha dado la razón.
Editor general, reportero
