El alcalde de San Salvador, Norberto Martínez Cruz, afirmó que su antecesor, el morenista Armando Azpeitia Diaz, posiblemente no podrá solventar observaciones a más de 150 obras de su administración, por un valor de 100 millones de pesos, debido a que todas las realizó “por administración directa”; es decir, entregó los recursos e insumos para que las localidades las ejecutarán.
Sabemos que la obra por administración directa pues es muy compleja porque se requiere tener una disciplina, una disciplina tanto técnica, tanto humana también y, sobre todo, también en maquinaria, y desgraciadamente no tenemos”, expuso.
Indicó que lo que posiblemente haga que su antecesor no pueda solventar las observaciones a 158 obras es que no se encontraron evidencias, bitácoras completas ni listas de raya.
Sobre todo también él pues tuvo algunas situaciones que en sus suministros no llevó los procesos. Si no a través de que lo hizo también por administración directa, no llevó los concurso (de adjudicación de la compra), y eso es hoy lo que ha observado Auditoría (Superior del Estado de Hidalgo), Contraloría”, dijo.
Adelantó que en fecha próxima la Secretaría de la Contraloría estatal acudirá al municipio para auditar las obras y los suministros adquirido por la gestión del exedil, así como los recursos financieros y técnicos del centenar de pendientes.
El alcalde dijo que han tratado de apoyar a Azpeitia Diaz para que subsane las observaciones, pero la respuesta es que no tienen más documentos para poder subsanarlas.
Es complicado porque, yo quiero decirle nosotros, nuestra responsabilidad también es ayudar a que él pueda solventar, les hemos dado las notificaciones a través de auditoría, a través de Contraloría, y bueno pues el compañero ha hecho caso omiso a través de su tesorero, a través de su director de Obras Públicas, tan es así que ellos ya se sinceraron hace un par de semanas, porque les damos las notificaciones para que nosotras podamos subir su información, y bueno ellos ya han dicho que pues ya no tienen más documentación”, expuso.
Indicó que el periodo de solventación de las irregularidades en las obras públicas y uso de recursos propios ya arribó a la segunda prórroga; de no hacerlo, el punto pasará al área jurídica.
(Las obras) se ejecutaron, pero desgraciadamente tienen observaciones en su administración, en la documentación o en sus procesos técnicos”, dijo.
Afirmó que a través de la administración directa se amplían las metas de construcción; sin embargo, si no se tiene la disciplina y el personal técnico humano, “por más metas, las obras son de menos calidad”.
Porque no aplican el cemento en su totalidad, como debe ser, de acuerdo a los conceptos (de construcción), y sobre todos también a veces vimos muchas irregularidades: que las comunidades validaban su expediente, pero utilizaban el material para hacer otra obra, y bueno pues ya se desacompletaban, entonces es la situación”, expresó.
Indicó que con el proceso de administración directa en casi todas las obras el exedil entregó el recurso materiales a las localidades y se hizo con mano de obra de los pobladores. Unicamente contrató constructoras para aquellas que requieren “mano especializada”, como los pozos.
Tan es así que te puedo decir que para techados se hicieron ahorita primeras etapas, ahorita tenemos las siguientes situaciones: como no tuvieron las asesorías técnica, no se elaboró un expediente técnico como tal, nosotros para poder hacer el arcotecho, una segunda etapa de las techumbres, necesitamos del apoyo de un experto en el área técnica para que nos dé ese respaldo, y bueno pues hoy no podemos seguir un continuar una segunda etapa para que nos puedan validar un expediente de una techumbre, porque no cumple con los preceptos técnicos de mecánica de suelo o estructuristas”, expuso.
Aseguró que técnicamente la mayoría de las obras están mal realizadas, por lo que han tenido que hablar con las comunidades respecto a que se deben comprobar los recursos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social (FAIS) para que no los afecte en próximos ejercicios fiscales.

Editor general, reportero