El gobernador Julio Menchaca Salazar afirmó que en el estado continuarán los operativos de puntos de control o retenes por parte del Instituto Nacional de Migración (INM), como parte de la política migratoria de la cual, dijo, Hidalgo no es ajena.
Después de que el viernes pasado en las carreteras México-Pachuca, Pachuca-Ciudad Sahagún, Pachuca-Tulancingo, Pachuca-Actopan y en Tizayuca personal del INM efectuó estas acciones para revisar el estatus migratorio de las personas, principalmente en transportes público, el mandatario refirió que este tipo de acciones responden al contexto que se vive con la política implementada por Estados Unidos.
El morenista indicó que esas acciones se replicarán, según constató con las autoridades federales.
“Sí, pues es una política nacional, no somos ajenos a lo que obedece el contexto nacional y son medidas que nos están dictando desde el gobierno federal, en donde el gobierno estatal y los gobiernos municipales somos solidarios, con orden y respeto”, subrayó.
Agregó que es testigo del trato que se le está dando a las personas migrantes. En caso de que hubiera queja de alguna persona, dijo, estaría atento para solucionarlo.
—¿Eso no vulnera su derecho humano al libre tránsito? —se le cuestionó.
—Son, es como la aplicación de la Ley de Armas de Fuego y Explosivos, hay casos en donde se establecen estos mecanismos por un objetivo particular, lo contempla la misma ley, se los digo como abogado —contestó.
Respecto si derivado de las acciones contra migrantes en Estados Unidos se registraron las primeras repatriaciones de hidalguenses en el segundo mandato del presidente de ese país, Donald Trump, Menchaca Salazar señaló -sin confirmar si hay o no- que “está trabajando” el director general de Atención a Migrantes de la Secretaría de Bienestar e Inclusión Social, Manuel Aranda Montero.
Él mismo fue migrante, él conoce bien la mecánica de todos estos ejercicios que hace el gobierno norteamericano para poder estar identificación migrantes o para deportarlos”, agregó.
Pese a la situación migratoria implementada por el país del norte, el mandatario reiteró su optimismo en que habrá prudencia de las autoridades estadunidenses.
Yo estoy confiado, de verdad, en que habrá prudencia, que el propio pueblo norteamericano esté consciente de lo que significa la fuerza laboral de la migración, no solamente de nuestros compatriotas mexicanas y mexicanos, sino de todos los que han aportado en el crecimiento de esa potencia”, manifestó.
Añadió que no es por medio de un “arrebato” como puede resolverse una situación “de una plataforma política”, en referencia a la postura de Trump.
Consideró que el interés económico debe de genera la “prudencia” en materia de deportaciones, por encima de lo que en su momento pudo ser “un intento desmedido” de ingresar a Estados Unidos por parte de migrantes del centro y del sur de América. Ello permita tener una ganancia para Estados Unidos y para México, dijo.
Ante este panorama, aseveró que “ya se ve la mano” de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo con un despliegue diplomático para enfrentar “esta situación particular que mortifica” y que provoca a todas las estructuras de gobierno tener una visión de políticas públicas y recursos “para que no exista un una crisis por esta posibles deportación”.

Reportero