Alrededor de ocho casos en investigación de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJH) por robo de auto están ligados a personas que dopan con químicos a sus víctimas, coloquialmente conocidas como “goteras”, a través de un mecanismo de citas por aplicaciones, hechos por lo cuales hay dos personas detenidas y avances en la identificación de presuntos cómplices, indicó el director general de la Unidad de Recuperación de Vehículos (URV) de la dependencia, Juan Manuel Santander León.
En entrevista para Acrópolis Noticias, el funcionario expuso que existen casos ocurrido en el distrito de Pachuca con peculiaridades en su modus operandi para el hurto de unidades móviles, que converge con otros ilícitos como el robo de pertenencias, riesgo a la salud de las víctimas y extorsión.
Señaló que a partir de la implementación de tareas de inteligencia, la URV, así como de la Unidad de Imputado Desconocido, observó este fenómeno delictivo.
Santander León refirió que la presencia de este modo delictivo generó preocupación, pues además de poner en riesgo la salud de las víctimas por el empleo de sustancias para adormecerlos, también observaron la intención de incrementar esta dinámica criminal en la entidad.
Indicó que por medio de la Unidad de Imputado Desconocido se tienen avances sobre el vínculo de personas con ese ilícito, Señaló que hasta el momento hay dos personas detenidas por estos hechos.
Expuso que por modalidad de robo de autos cuenta con ocho carpetas de investigación; de ellas, en dos casos se presume que la misma persona está involucrada con el despojo a través de dopar a las víctimas.
El funcionario de la PGJH agregó que hay cómplices de quienes ya se tiene avances para determinar sus identidades, con la colaboración de la Unidad de Inteligencia de la Agencia de Investigación Criminal, lo cual se sigue por medio de las líneas telefónicas, precisó el director general de la URV.
Añadió que requieren de más diligencias y control judicial para poder obtener autorizaciones de los jueces federales para tener una investigación “más integral”.
De acuerdo con Santander León, esta actividad también se puede relacionar con el robo de pertenencias como dinero, celulares y otros objetos que llevan las víctimas consigo durante el encuentro, así como la extorsión, ya que al obtener datos, información, imágenes y contactos de la persona agraviada, los delincuentes pueden mandarles mensajes para exigirles dinero a cambio de no publicar su información personal.
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