La estadounidense Simone Biles, una de las mejores exponentes de la gimnasia artística, volvió este domingo a la competencia olímpica, con una gran ovación Bercy Arena de París
Hace tres años Biles renunció a la final por equipos y a cuatro finales por aparatos por un episodio de ‘twisties‘ (un problema de perspectiva espacial en el aire que resulta muy peligroso para las gimnastas).
Este día, la gimnasta comenzó en la viga de equilibrio, ejecutando de manera casi impecable una rutina que le valió una puntuación de 14.733.
En el calentamiento para la segunda rotación en el ejercicio de suelo, Biles se torció el tobillo izquierdo al completar un doble mortal hacia atrás con medio giro; sin embargo, la multimedallista olímpica y mundial regresó al tapiz para presentar una rutina competitiva con un fuerte vendaje, y cumplió con una presentación sólida, aunque con algún problema en los aterrizajes, para un 14.666.
La incertidumbre continuó durante el calentamiento de salto, donde regresó a su posición gateando durante buena parte del camino antes de continuar saltando solo sobre su pierna derecha, pero cuando llegó el momento de competir asombró al pabellón con un amplísimo salto que le valió una puntuación de 15.800.
Biles cerró su espectáculo en las barras asimétricas con una puntuación 14.433. Tras cerrar todas las subdivisiones de la competencia, Estados Unidos se ubicó en la cima de la clasificación, con 172.296 puntos.
En el All Around, Simone Biles quedó por delante de la actual campeona, su compañera Suni Lee, con 56.132, mientras que Jordan Chiles obtuvo la tercera posición, con 56.065. Sin embargo, quedó fuera de la final por el límite de dos gimnastas por país.
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