Madres de familia de la escuela primaria La Reforma acusaron que desde hace un par de semanas ejidatarios de la comunidad de Dengantzha, en Francisco I. Madero, intentan despojarlo de un predio que, aseguran, es campo de futbol propiedad del plantel, para lo cual se sucutaron actos de violencia entre pobladores en la disputa.
En las escalinatas de palacio de gobierno, ayer se dieron cita tres mujeres, las cuales, expusieron la situación tensa que se vive en este punto del municipio y que el jueves y la mañana del viernes se intensificó con agresiones de quienes, aseguran, son ejidatarios que buscan hacerse de del terreno contiguo al plantel.
Taras tener contacto con los medios, una trabajadora del Poder Ejecutivo estatal se acercó para asegurar que se les iba a atender.
Margarita Santos Mendoza, un de las quejosas, dijo que acudieron a la sede oficial para entregar un oficio al mandatario Julio Menchaca Salazar sobre el asunto, mientras que un grupo de padres de familia acudía a la Secretaría de Educación Pública estatal (SEPH) para exponer la problemática y otros hacían guardia en el terreno en discordia.
Al manifestar que se encontraba en representación del comité de padres de familia de la primaria de La Reforma, acentuó que la escuela es propietaria del campo deportivo que suman alrededor de mil 100 metros cuadrados, cuya posesión y escritura está favor de la institución desde hace más de 66 años.
Manifestó que el jueves, como punto de quiebre del asedio de los ejidatarios al predio desde hace 15 días, varias personas se reunieron para tirar la barda perimetral, ya que estaban los trabajos para tirar la vieja estructura del muro por el riego que implicaba para los infantes que ahí hacen sus actividades.
Aseguró que como parte de los hechos le pegaron a niños y a mujeres, por lo cual interpusieron una denuncia por las agresiones de las cuales, acusaron, fueron víctimas por parte de personas vinculados a los ejidatarios.
Nosotros tenemos la posesión desde hace más de 60 años, aclaramos eso, ya tenemos las denuncias correspondientes en contra de estas personas”, reiteró.
ES DEL PUEBLO, ALEGAN EJIDATARIOS
Respecto a lo que argumenta la otra parte, mencionó que los ejidatarios aseguran que el predio pertenece al pueblo; es decir, a la comunidad, versión que rechazan los tutores.
Mientras mostraba imágenes del espacio y de una mujer con la hinchazón en su pómulo, la cual acusó que le ocasionó una de las personas que invadieron el espacio, otra de las acompañantes, quien omitió dar su nombre, agregó: “los problemas no se resuelven a golpes, no se resuelven pateando a las mujeres, no se resuelve humillándonos, no se resuelve agrediendo a los niños que estaban jugando futbol y aún así vinieron y los agredieron”.
Santos Mendoza acreditó insistió en que se interpuso una denuncia ante el Ministerio Público por estos hechos de violencia, amenazas, daño a propiedad, intento de feminicidio y lo que resulte, mencionó.
Aseguró que las acción son encabezadas por el comisariado ejidal Agustín Viveros Bautista, otra persona de nombre Benito Rosas Pérez y el delegado Rafael Santiago Martínez.
Añadió que el quien se ostenta como comisariado ejidal desde hace más de 20 años sabe que el terreno no es propiedad ejidal ni comunal, sino de la escuela, constancia que él firmó como representante comunal, sostuvo.
Mientras se desarrollaba la entrevista en las escalinatas, una treintena de personas arribó. Al verlas, la representante de los padres y madres de familia de la primaria identificó las como parte de las agresoras, acompañadas por las autoridades comunitarias.
Esto implicó que uno de los integrantes del otro grupo recriminara lo que decía Margarita, lo cual calificó como “mentiras”.
Estas falseando información”, se escuchaba detrás al momento que llegaba el grupo de personas, a quienes también se les pidió su versión de estos hechos, pero se negaron. Incluso, se mantuvieron hostiles a cualquier pronunciamiento y a que se fotografiara su presencia.
La quejosa aseguró no todos los ejidatarios apoyan la postura que atribuyen el comisariado y sus acompañantes y agregó que en la zona hay presencia de la policía estatal y de Guardia Nacional ante cualquier acto de violencia tras estos hechos.
De acuerdo con videos que compartieron los quejosos, ayer se dio una confrontación entre padres y madres de familia y quienes buscan hacerse de este terreno, con varias discusiones, confrontaciones verbales y físicas.
El desencuentro registrado termina con el derrumbe de bardas viejas y de castillos y estructura nueva que está en proceso de delimitar el perímetro del terreno. También se observa el uso de un extintor por parte de la parte señalada como agresora para dispersar a quienes vigilan el predio y evitar ser grabados.
Reportero